Primitivamente le permitía al hombre diferenciar si una presa estaba en condiciones de ser digerida y con ello percibía lo agradable o desagradable para su consumo.
El bulbo olfatorio capta ciertos olores como peligro y nuestro sistema nervioso se pone en alerta.
Humo, comida en mal estado, etcétera.
Es la misma conducta que hoy tenemos ante cualquier situación para percibir el afuera, lo cual nos da la pauta que nuestro cerebro es un chip con dos millones de años y sigue funcionando igual.
El sentido del olfato está directamente relacionado con los recuerdos, ciertos aromas, perfumes, épocas o personas.
¿Cómo funciona la memoria olfativa? Se rige por el sistema límbico cerebral, más específicamente con la amígdala y el hipocampo; es una estructura encargada de procesar la información que traen los neuroreceptores.
Sabiendo que la memoria humana funciona por asociación recomiendo siempre tener un perfume muy personal y aromatizar el ambiente y el contexto erótico.
¿Por qué explico esto? Para que aprendan a usar el cerebro a favor del sexo. Cada vez que tengan un encuentro sexual, sexo oral o masajes eróticos usen cosmética sexual y lindos perfumes. Esto queda grabado en nuestro cerebro como esquema se recompensa y automáticamente lo va a asociar.
Recuerden que el cerebro busca re-estimularse y vuelve siempre a donde recibió placer y estuvo lejos del peligro.
