Esta hortaliza ligera y suave suele ser considerada un alimento regulador de la dieta y equilibrante. La razón es que el 92% de su peso es agua, su aporte calórico es muy bajo, entre las 15 y las 20 calorías y tiene un gran poder saciante.
El apio pertenece a una extensa y notable familia vegetal, caracterizada por un marcado sabor especiado, intenso, aromático y exótico: las umbelíferas o apiáceas, son plantas tan populares como la zanahoria, el hinojo, el perejil, el eneldo o el comino, y otras tan poderosas como la cicuta.
Es un gran depurativo. Gracias a su contenido en potasio, estimula la producción de orina. Además, combate el estreñimiento y facilita la digestión; ayuda a perder peso; combate cálculos renales; relaja, reduce la tensión arterial y tiene propiedades anticancerígenas.
¿Cómo hacer un té de apio?
Ingredientes: 500 ml de agua y un tallo de apio
Preparación: hiervan el agua ya agregen el tallo de apio. Déjenlo hervir unos 10 minutos, luego cuelen y sirvan. Si lo desean, pueden endulzarlo.